Chaco: en busca de la identidad de un pueblo. “Hemisferio Sur; enclavado en lo más austral del Planeta Tierra… ARGENTINA; del latín argentum (plata), nación enarbolada de gestas patria, de próceres y hacedores que con su vida forjaron venturosos una Nación…” Por Carlos A. Negrini Resistencia – Chaco, República Argentina – 1810 – 2010; dos siglos de historia en el solaz de la humanidad. Desde la cruz y la espada española, a través del fulgoroso complejo y enmarañado Cabildo de Mayo de 1810; y la prosapia de Próceres enardecidos y venturosos en Tucumán de 1816 exclamaron Libertad e Independencia. La estampida recurrente y el auge de transacciones comerciales con el viejo mundo deambularon en las memorias de la historia; un sinfín, de encarnizadas luchas clasistas por el poder unitario y federal. Corrientes migratorias nacidas a partir de su colonización, se hacen refugio en esta Patria. Son más de 300.000 personas, pertenecientes a numerosas civilizaciones, culturas, ciudades y tribus distintas. Más adelante(1914 y 1939); Europeos desamparados, pobres, caídos y exiliados ante la infernal Guerra de los Siglos que desencadenaron en la conciencia colectiva la más terrible crueldad de la Especie humana; el “Exterminio”. “Generosa en su bondad, colmada de inusual crisol de Razas que deambulan en el sentimiento Patrio de austera soledad entre hermanos; el arraigo se hace fútil y la mirada se centra en más allá del charco” (léase océano Atlántico). Pero la historia de la Provincia del Chaco; se origina a partir de 1585; firmes jalones de civilización buscan trazar el camino hacia el Alto Perú, el “camino del oro”; vil metal enraizado en el corazón de la conquista. Los españoles de Asunción levantan la Ciudad de Concepción del Bermejo de la Buena Esperanza, región habitada por numerosas Razas Indígenas y nómades, de proverbial belicosidad, la cual fuera destruida en 1632; por los indígenas chaqueños. La impronta evangelizadora no estuvo ausente y aunque muchas veces se la menosprecie por su vinculación a la colonización; el Sistema de Reducciones (guaraníticas – jesuíticas), encaradas de manera pacífica e integradoras en el respeto y solidaridad del prójimo. Bregaron por la paz entre aborígenes y las pequeñas poblaciones colonizadoras, utilizando la Música como aporte fundamental a la causa. De tal manera que buscaban impedir por su lado, que las tribus atacaran a las poblaciones y por el otro, defender a los nativos de los abusos propiciados por los conquistadores contra las tribus, enajenando su libertad, haciéndolos trabajar ilícitamente e induciendo a su extinción mediante el desarraigo de sus tierras. Las reducciones organizaban a los pueblos originarios según su linaje o etnia en función de su organización tribal. Así pues; el Sistema de Reducciones encarados en gran medida por los misioneros de la Compañía de Jesús, hasta su expulsión decretada por el rey español Carlos III en 1767. Sin embargo; fueron luego, los Franciscanos y Mercedarios quienes desempeñaron una labor austera y significante en materia, cual vestigios lo convalidan en la actualidad. 1750; Con el nombre de “San Fernando”, se hace incuestionable el proceso fundador de la historia de la Provincia del Chaco topónimo incaico que originariamente se pronunciaba “Chacú” en la acepción indígena devenida en una “Junta de Naciones”, lo cual pasó a construir una significación figurada de “Chaco”; pronunciación deformada por los españoles. A finales del siglo XIX y principios del siglo XX; la inminente ocupación militar del Chaco central y Chaco austral, avanzó afanoso sobre el belicoso pueblo indígena que indefectiblemente concluyó con la conquista del territorio Primero; Territorio Nacional creado el 31 de enero de 1872 y luego; Provincia del Chaco, declarado mediante Ley 14037, del 8 de agosto de 1951. Es innegable que a partir de 1878, tras rastros de civilización, se inicia el proceso inmigratorio en el Chaco que desencadena un acelerado progreso a través de pueblos y ciudades de extraordinaria vitalidad. Los últimos cien años de historia Argentina, hacen de la Provincia del Chaco una visión en instantáneas de los hechos significativos que patrocinan la historia socio cultural y económica de esta región conocida como Litoral. Demarcada por los ríos Paraná, Uruguay y Paraguay, integrada por las tres provincias mesopotámicas; Misiones, Corrientes, Entre Ríos y las provincias de Formosa, Chaco y Santa Fe. No lejos en el tiempo; la llegada de los “gringos”, con su bagaje de cultura europea, la tradición guaranítica de los hacheros correntinos; y la diezmada cultura aborigen chaqueña, forjaron el Nuevo Nacimiento del Chaco, crecieron los algodonales y se habitó el monte en virtud de la fuerza productora que confluye en una raza expiada por los soles, los veranos calcino y el viento norte insensibilizando la piel de los recién llegados. Un nuevo misterio encarnizado por sonidos y voces con idiomas extraños; se mezcló el guaraní y entonces se habló un idioma nuevo. Creció la Patria grande y finalmente a este vástago insoslayable de virtud, se lo llamó Provincia del Chaco. Con una marcada fuerza Tradicionalista pulida en el Folclore Litoraleño; la Música del Chaco se nutre de tres corrientes culturales que convergen en la música del litoral; música, ritmos, canto y danza populares: El Aborigen de preminencia Toba o idiosincrasia Qom, Abipones y Mocovíes sobre la llanura chaqueña y los Guaraníes sobre los esteros correntinos; pobladores ancestrales de estas tierras. Del guaraní con el español y luego el aporte alemán, desde el sur del Brasil hacia la Resistencia chaqueña con el Chamamé; quizás el más acuñado por sus pobladores en la actualidad. El folclore criollo; fecundado por la cultura española e incaica, que adquiere rasgos distintivos hacia los montes chaqueños. El espectro de influencias en la denomina Música Litoraleña, es aún más amplio y abarca la Música Gaúcha proveniente del Sur de Brasil, la Música del Litoral del Uruguay y la Música del Paraguay. Por su parte; es un tanto difícil concebir la Música Litoraleña sin la Danza; hecho característico que posee una particularidad común; los estilos se bailan con la pareja enlaza y por lo general son de coreografía libre. Y por otro lado; la particularidad bilingüe en la interpretación de las letras (español – dialecto tribal); variados estilos se desarrollan en la región (en mayor o menor medida), de los cuales se destacan: El Chamamé (por excelencia), la Polka Correntina, la Polkita Rural, la Galopa, también llamada Galopera; Chamarrita, Rasguido Doble, Valseado, Chotis, Ranchera, Gualambao, Canción Misionera, Balerón y Kolomeica. La Polka paraguaya, la Guarania y el Purajhei (canción del litoral paraguayo). Una vez más; la historia, ineludiblemente nos remonta a la impronta prehispánica y el aporte de las Misiones Jesuíticas – Guaraníes. En la figura de San Francisco Solano, quién caminó la tupida selva al compás de su Violín angelical entre 1586 y 1610… De Allí; se sucede un hecho inaudito y conciliador, el trabajo en los “Talleres Artesanales y Musicales”, espacio en el que ambas culturas ancestrales se fusionan rediseñando e inventando nuevos instrumentos y re-significando la música de la región. Así fue claro el advenimiento de las “Bailantas Chamameceras”, que a gritos de Sapukay (grito del hombre litoraleño, especialmente del correntino chamamecero, que encierra diversos motivos; tristeza, alegría, triunfo o simple esbozo de comunicación en el monte o en el río…). Nacidas alrededor de la actividad forestal y que perduraron en el tiempo en la ciudad de Resistencia; provincia del Chaco hasta 1950 aproximadamente. Aún hoy se guarda en los grupos tradicionalistas la Música y Letra de autores de pura prosapia que cuentan historias de soledades, de perpetua introspección, de amor por la naturaleza y las emociones que emanan del arduo trabajo del hombre de campo. Los Conjuntos típicos Chamameceros se conforman instrumentalmente con la guitarra “criolla” (a veces más de dos); acordeón a piano, de pistones o ambos y muchas veces se suma al Bandoneón. Su disposición musical polirítmica de estructura base, se ejecuta en pie binario (3/4), mientras que la melodía, es decir; el canto como los instrumentos de rasgueo, se sobreponen melódica y tonalmente con una estructura ternaria (6/8). En la actualidad; la Música Popular Contemporánea ha realizado un aporte significante a la música litoraleña y esta se ha fusionado con elementos del Jazz y ha incorporado instrumentos tales como el Bajo eléctrico, la Batería, el Teclado, la guitarra eléctrica y hasta la percusión latina; en busca de nuevas significaciones que muchas veces contrasta con lo tradicional y es subterfugio de intrincadas controversiales de discusión. Al devenir de los tiempos y en estos últimos 50 años de internalización cultural y musical; yace una provincia joven y dolorida, venida a pobre de entre las 23 provincias que integran la República Argentina. La expansión cultural de estos últimos tiempos; la convierte en un polo de cultura que busca abrirse al mundo y contar su verdad. “Es así… El Chaco joven y caminante, se debate de entre sus orígenes y su austera realidad, para sentar precedentes en el mundo; tras la inquebrantable búsqueda de identidad de su pueblo…” Carlos A. Negrini carlos75can@hotmail.com Resistencia – Chaco , República Argentina Musinetwork News Musinetwork Inc