En esta ocasión quisiera hablar acerca de un arte olvidado, pero que sigue teniendo un intenso valor para nosotros los músicos. Hablo desde luego de la laudería, actividad artesanal a través de la cual se producen instrumentos únicos que son de fabricación totalmente manual. Y desde luego no se puede hablar de la laudería en México si no se habla de Paracho, Michoacán.

Paracho de Verduzco comúnmente conocido simplemente como Paracho, es la cabecera del municipio de Paracho, en el estado de Michoacán, México. Es una comunidad rural de la meseta purépecha rica en tradiciones, entre ellas podemos mencionar la producción artesanal de guitarras y artículos de madera, cuenta también con una amplia y variada gastronomía.

Por generaciones enteras, este pueblo mágico ha sido el lugar de nacimiento de las mejores guitarras e instrumentos de cuerda en México, obteniendo también gran relevancia a nivel internacional. Pero, ¿Como surgen los artesanos en Paracho?

Desde la época colonial, el pueblo purépecha captó la atención de los conquistadores españoles por la gran habilidad de los indígenas para la creación de artesanías de madera, de esta manera la tradición de los instrumentos cordófonos es pasada al pueblo michoacano.

La gran problemática que se vive hoy en día en Paracho es una lamentable baja en la venta de instrumentos cordófonos, la causa es el incremento de la demanda de instrumentos de fabricación extranjera, que en la mayoría de los casos tienen un costo mucho menor, proporcional a la calidad que ofrecen. Esta problemática ha provocado que la valiosa tradición de la laudería en Paracho se vea en riesgo de desaparecer, ya que las nuevas generaciones descendientes de los lauderos, deciden ya no continuar con el oficio de sus padres, pues provoca desconfianza la baja rentabilidad del mismo.

Sería una buena idea concientizar acerca de la importancia de la laudería como patrimonio cultural de México y como parte indispensable del desarrollo del músico, con el fin de promover la compra y uso de instrumentos artesanales de alta calidad y en consecuencia, evitar la extinción de una tradición tan antigua y tan valiosa.